¡ZachXBT destapa el oscuro secreto de Crypto.com: qué te ocultan sobre su filtración de datos!

El rollo de las criptomonedas es todo un mundo que sigue creciendo, y en el centro está el Bitcoin, como el mero mero que pone el ritmo. Pero la cosa no es fija: el porcentaje que tiene Bitcoin del total del mercado – lo que llaman su “dominancia” – sube y baja, y eso siempre prende la conversación entre los que invierten o siguen este cotorreo. Cuando baja la dominancia, muchos se preguntan: ¿estamos viendo que la banda está cambiando de Bitcoin a las altcoins, o solo es otra etapa del juego?

Cuando Bitcoin ya lleva buen rato estable y con buen precio, la banda que hizo lana se anima a buscar opciones más arriesgadas para ganar más rápido. Ahí es cuando las altcoins, esas monedas alternativas, agarran vuelo porque, aunque son más locas y peligrosas, pueden dar ganancias más gordas en menos tiempo. Por eso, el dinero se mueve y las altcoins suben, mientras Bitcoin pierde un poco de su lugar.

Mucha gente piensa que cuando esto pasa, las altcoins están creciendo y mejorando, porque traen nuevas ideas y tecnologías chidas, como contratos inteligentes o soluciones para que todo sea más rápido y barato. Los inversionistas quieren ser parte del próximo boom y ven estas monedas como la forma de entrarle al futuro de la chamba financiera descentralizada. Así que la caída de Bitcoin no es porque esté débil, sino porque el ecosistema se está poniendo más diverso y lleno de innovación.

Pero también hay otra forma de verlo: que esta bajada no significa un cambio real, sino que es apenas el reflejo de cómo se mueve la banda según el riesgo. Bitcoin es como el lugar seguro dentro del mundo cripto, la inversión “menos loca”. Cuando el mercado está pelón o la cosa se ve fea, la gente corre pa’ Bitcoin. Cuando la onda está positiva y se sienten más valientes, le tiran a las altcoins, que son más volátiles y arriesgadas.

Entonces, cuando las altcoins suben y Bitcoin baja en dominancia, es más que nada la psicología del mercado: un termómetro de confianza y ganas de jugarle. En las épocas chidas, la gente quiere más las apuestas locochonas, buscando ganancias rápidas aunque se arriesgue a perder. Este rollo se ha visto muchas veces: Altcoins suben en onda de euforia y Bitcoin recupera su lugar cuando se pone más serio el asunto.

La relación entre Bitcoin y altcoins es de equipo. Bitcoin es la base firme que da confianza y mueve la lana para que otros puedan aventarse con cosas más riesgosas. Las altcoins, a su vez, atraen nuevos jugadores y hacen que la innovación crezca, lo que al final ayuda a todos, incluido el propio Bitcoin. La dominancia de Bitcoin no es un número solo, es parte de este juego donde todos se necesitan.

Aunque se dice que cuando Bitcoin baja, las altcoins van viento en popa, hay que tener ojo porque a veces todo puede ser un truco de los grandes peces del mercado, las “ballenas”. Estos peces gordos pueden mover precios a gusto, moviendo el capital de Bitcoin a altcoins chiquitas para inflar sus precios y luego vender cuando todos se emocionan, dejando al resto con la mano en la masa.

Así que lo que parece un crecimiento natural o aceptación de altcoins, puede ser una jugada para sacar lana rápido. Esto nos recuerda que, más allá de la innovación o la psicología, el poder y la estructura del mercado tienen mucha influencia en lo que vemos.

Al final, la dominancia de Bitcoin no es nada simple. Cuando baja, puede decirnos que la banda anda emocionada con las altcoins buscando riesgo, pero también que esto es solo un ciclo. El dinero va y viene entre Bitcoin y las altcoins, y aunque estas últimas brillen, no quieren decir que Bitcoin esté perdiendo, sino que el mercado está más maduro y variado. Lo que importa es saber si estamos viendo un cambio de verdad o solo es la moda pasajera de querer jugarle a la volatilidad.

¡Así que ojo abiert@ y a investigar antes de aventarte con tu lana!