¡David Bailey le dio la señal a los traders para vender KindlyMD y las acciones se desplomaron un 55%! ¿Quién lo vio venir?

Las acciones de KindlyMD Inc., la empresa de salud que ahora es holding de Bitcoin, se desplomaron a la mitad el lunes. ¿La razón? Su CEO, David Bailey, avisó que el precio de las acciones se va a poner bien movido y les recomendó a los traders que solo busquen ganar rápido, que mejor vendan ya.

Bailey mandó una carta a los inversionistas diciendo que esperan más volatilidad en el precio por un buen rato. Esto porque la empresa acaba de hacer una venta de acciones con descuento por 200 millones de dólares a unos inversores privados, y ahora esos cuates pueden vender sus acciones libremente.

El CEO fue bien claro: “Si solo vienes por la lana, te recomiendo que chalés ahorita.” No es para menos, luego de que las acciones se les cayeran más del 55% tras ese anuncio, cerrando en $1.24 dólares.

El rollo es que esta venta de acciones, llamada PIPE, metió más papel en el mercado, lo que hace que el precio se mueva como si fuera tormenta. Pero para Bailey esto es como un filtro: los que no están en la onda del proyecto se salen y queda la banda que realmente cree en lo que viene para largo.

En su cuenta de X (antes Twitter), Bailey dijo que ese día fue de “transición”. Hubo un volumen brutal de casi 80 millones de acciones, porque la firma está cambiando su grupo de accionistas de los de “vivales” que buscan ganar rápido, a los que tienen visión a largo plazo.

Otro dato curioso: el valor que tiene KindlyMD en Bitcoin es más alto que lo que vale la empresa en la bolsa. Tienen más de 5,765 BTC que suman más de 665 millones de dólares, pero la capitalización de mercado anda por los 466 millones. O sea, la empresa está en números rojos en cuanto a valor líquido, pero Bailey nada más no se agüita y dice que su chamba es convertirse en la institución financiera líder en Bitcoin, y para eso hay que pensar en grande y moverle con calma y estrategia.

Así que si andas metido en este cotorreo, pilas: puede andar medio turbulento, pero la visión es echarle ganas con la mira bien puesta en el futuro.