¡El CEO de Binance revela el secreto de Bután para ser feliz… y su conexión sorpresa con las criptomonedas!
El mero CEO de Binance, Richard Teng, anduvo de visita en Bután, ese reino chido en el Himalaya, y dijo que las criptomonedas y todo el rollo digital pueden llevar la misma onda que la famosa Felicidad Nacional Bruta (FNB) de ese país.
En una plática con la prensa durante el Binance Crypto-Powered Tour, los de Cointelegraph le preguntaron si la movida cripto va con la forma de ser del país, que no trata de hacer lana nomás, sino de estar bien chido y feliz. Teng contestó que, neta, los valores de las criptos van de la mano con eso. Dijo que la cosa es bien simple: las criptos están para darle libertad financiera a la banda y que nadie se quede fuera. O sea, ayudan a que la gente esté mejor, todo en buena onda.
La receta de Bután para la felicidad, según su rey de los 70s, es poner el feeling por encima de hacer dinero. A ellos les late la idea de que lo más importante es sentirte bien, no solo juntar billetes. Por eso, aunque parece que las criptos son rápidas y medio locas, Teng cree que pueden ser la neta para ayudar a la gente, sobre todo allá donde no hay bancos chidos.
Y no solo es choro, porque el tipo ha visto a banda en todo el mundo que se ha hecho de su independencia financiera con crypto, sobre todo en lugares donde es difícil que te den chance con los bancos. En Bután confían un buen en la innovación y creen que esto puede hacer que la gente esté aún más feliz.
Además, con esto de las criptomonedas, Bután podría atraer billete extranjero y seguir siendo, literal, el “Reino de la Felicidad”.
Por cierto, el gobierno de Bután, con su rey Jigme Khesar Namgyel Wangchuck, ya se puso las pilas con esto de las cripto. Están haciendo cosas cool como minar Bitcoin usando energía hidroeléctrica, que es medio eco-friendly, y armando una reserva de criptos que ya tiene más de 13,000 BTC. Eso los pone en quinto lugar mundial, ¡sí, arriba de El Salvador!
En mayo también empezaron a aceptar pagos con cripto gracias a Binance, para darle un boost al turismo y atraer a la banda que ya anda en el mundo digital. Eso sí, enfrentan retos como que el internet ahí está de bajón, así que todavía tienen que darle duro para que todo fluya chido.
En fin, Bután se está rifando con la mezcla de tradición, felicidad y tecnología, y está apostando a que las criptos sean parte del futuro de su bienestar. ¿Quién diría que un país tan lejano y tranquilo se volviera un jugador importante en el juego cripto? Pues ahí la llevan.
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