¡Malasia revoluciona el juego! Lanza un centro secreto para testear stablecoins y dinero que se programa solo 🚀💸

¡Órale, banda! Malasia acaba de lanzar su nuevo proyecto llamado Digital Asset Innovation Hub, un lugar chido donde las empresas de tecnología financiera y activos digitales podrán experimentar con nuevas ideas, todo bajo la mirada atenta del banco central del país.

El mismo martes, el primer ministro Anwar Ibrahim soltó la bomba durante el Simposio Sasana 2025 en Kuala Lumpur. Dijo que este Hub es como el arranque de un nuevo capítulo para la economía digital de Malasia. Aquí, las empresas van a poder probar desde pagos programables hasta stablecoins respaldadas por su moneda, el ringgit, y hasta mejorar la financiación en la cadena de suministro, todo en un ambiente bien controlado.

Anwar también dejó claro que quieren juntar lo mejor del sector público y privado para hacer de Malasia un país súper digital y listo para lo que venga.

Ahora, este Hub es el motor que impulsa a Malasia a ser la estrella regional en fintech. En el mismo evento, el gobernador del Banco Central, Abdul Rasheed Ghaffour, dijo que tienen que poner al día su infraestructura financiera para no quedarse atrás en este mundo que avanza rapidísimo. Están trabajando en modernizar el sistema de pagos Rentas, conectar pagos cruzando fronteras y explorar la tokenización de activos, todo para hacer su sistema más resistente y fuerte.

En abril, Anwar se aventó una reunión con el fundador de Binance, Changpeng Zhao. Aunque Zhao ha tenido broncas legales y las autoridades malasias ya le habían puesto el alto en 2021, Binance regresó al mercado ahí gracias a una participación menor en MX Global, que sí está bajo la lupa regulatoria local.

Mientras tanto, en Singapur la cosa va diferente. El 30 de mayo, la Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) empezó a poner reglas más duras. Si alguien quiere ofrecer servicios con tokens digitales fuera del país sin licencia, que mejor pare antes porque tienen hasta el 30 de junio para cumplir o se las van a ver feo. No hay medias tintas ni prórrogas, la ley es clara: o licencia o fuera. Y si no obedeces, las multas pueden ser de hasta 250 mil dólares singapurenses y hasta tres años en la cárcel.

Así que ahí tienes el chisme: Malasia quiere surfear la ola digital con su Hub de innovación, mientras Singapur pone más candados para controlar la fiesta cripto.

¡Suerte si le entras a este rollo! Recuerda que invertir en cripto es un riesgo y más vale que investigues bien antes de soltar lana.