Este minero de Bitcoin con suerte de 1 en 300 años acaba de ganar la recompensa que nadie esperaba ¡Increíble!

El verdadero problema de que la innovación cripto esté saliendo de Japón no son los impuestos, sino los cuellos de botella regulatorios, dice Maksym Sakharov, fundador y CEO de la firma Web3 WeFi.
Sakharov platicó con Cointelegraph y comentó que aunque se aplique el nuevo impuesto fijo del 20% a las ganancias en cripto, la lentitud y el miedo al riesgo en la aprobación de proyectos en Japón seguirán haciendo que las startups y el dinero se vayan a otro lado.
“El impuesto alto y progresivo, que puede llegar hasta 55%, duele y se nota, pero ya no es el principal obstáculo”, explicó. “El rollo es cómo la FSA y la JVCEA manejan todo con su preaprobación lenta y la falta de un espacio para experimentar de forma ágil, eso hace que los desarrolladores y el dinero se vayan a otros países”.
Para sacar un token o lanzar una oferta inicial en un exchange en Japón, hay que pasar por dos revisiones: una por la Asociación Japonesa de Exchanges de Activos Virtuales (JVCEA) y otra por la Agencia de Servicios Financieros (FSA). Eso puede tardar de 6 meses a un año, o hasta más, dijo Sakharov, y eso consume mucho dinero y hace que varios equipos prefieran lanzar su token fuera de Japón antes que aquí.
Además, señaló que se han acumulado retrasos en varios pasos, como la revisión de tokens, la validación de documentos para las ofertas iniciales o los avisos de cambios en productos. Todo eso pasa por varias rondas de revisión y no facilita que se lance algo rápido. “El sistema está hecho para prevenir problemas, no para acelerar la innovación”, comentó.
Comparado con otros países, Sakharov dijo que Japón está atrás. “Aquí todo es más lento”. Por ejemplo, una simple lista de tokens puede tardar medio año. “Singapur también es estricto, pero te da caminos más claros; Emiratos Árabes Unidos es más rápido; y Corea del Sur se enfoca en supervisar a los exchanges mientras trabajan, no en aprobarlos antes, por eso listan más rápido”.
Avisó que el impuesto del 20% y la nueva clasificación de las criptos como producto financiero no van a cambiar nada a menos que cambie la cultura de aprobaciones. “La cultura se come los recortes de impuestos en el desayuno”, soltó Sakharov.
Para mejorar las cosas, sugirió que los reguladores hagan aprobaciones basadas en el riesgo con tiempos definidos, que creen un espacio (sandbox) funcional para probar cosas como staking y gobernanza, y que los requisitos para informar sean proporcionales y no un rollo pesado.
Si no cambian eso, avisó, los proyectos chilangos van a seguir emigrando, porque nadie quiere pasar años construyendo para que les digan que no pueden listar su token o lanzar su producto.
En Asia, el liderazgo en cripto está llamando la atención mundial. Maarten Henskens, de Startale Group, dijo que las reglas claras en la región están trayendo inversionistas que antes no se involucraban. Hong Kong, por ejemplo, se movió rápido con su “Ensemble Sandbox” para apoyar la innovación en forma ágil. “Mientras Japón está planeando en grande a largo plazo, Hong Kong está mostrando que ser rápido da chance de experimentar”, comentó Henskens.
En Emiratos Árabes Unidos también están avanzando con proyectos de tokenización y reglas que animan a negocios fintech y a inversionistas globales a entrar.
Ojo: lo que aquí se dice no es consejo para inversiones ni refleja la opinión oficial de Cointelegraph. Siempre investiga bien antes de mover tu dinero.
Respuestas