¡XRP va con todo! La batalla épica antes de romper su récord histórico

Roger Ver, el famoso “Bitcoin Jesus” y uno de los primeros en apostar fuerte por Bitcoin, se metió en broncas legales. Resulta que está demandando a España para que no lo extraditen a Estados Unidos, porque allá lo acusan de evadir impuestos.

Él y su equipo llevaron el asunto al Tribunal Europeo de Derechos Humanos, diciendo que mandarlo a Estados Unidos sería violar sus derechos humanos, según publicó Bloomberg Law.

Los gringos lo acusaron en abril de 2024 de deber como 48 millones de dólares por fraude fiscal, y España no se hizo de rogar para detenerlo. Pero en mayo Roger pagó la fianza y salió de la cárcel.

Cointelegraph quiso preguntarle qué onda, pero no contestó. A lo largo del rollo, Ver ha dicho que todo esto es puro chisme político y que él es inocente.

Además de ser polémico, Roger creó Bitcoin Cash, que es como una versión alternativa de Bitcoin, y aunque mucha gente en el mundo cripto no está de acuerdo con él, varios expertos y veteranos del medio le están echando la mano y pidiendo que el Departamento de Justicia deje el caso.

Para seguir peleando, en diciembre de 2024 sus abogados pidieron que se desestimen los cargos, diciendo que el impuesto que quieren cobrarle es inconstitucional. Según ellos, ese “impuesto de salida” de Estados Unidos, que aplica para cualquiera que quiera renunciar a su ciudadanía y tenga más de 2 millones de dólares, no tiene sustento legal.

Ross Ulbricht, que fue perdonado por el expresidente Trump y también es un personaje famoso en el mundo cripto, salió a decir que ya estuvo bueno de tanto rollo y que a Roger deberían de dejarlo tranquilo.

Vitalik Buterin, el cerebro detrás de Ethereum, apoyó la idea, calificando ese impuesto como “extremo” y diciendo que todo este caso está más bien motivado por cuestiones políticas.

En resumen, esto está respondiendo a mucha gente que cree que no es justo que alguien tenga que acabar en la cárcel solo por problemas con impuestos, y más cuando la bronca parece tener otros intereses de fondo.

Nada más, aguántense para ver cómo sigue esta novela del “Bitcoin Jesus” y su apuesta para no acabar tras las rejas.