¡Esto pasa cuando las grandes empresas acumulan bitcoin pero los récords no llegan!

Resulta que un tipo llamado Michael Zidell, que dice haber caído en una estafa romántica ligada a criptomonedas, ya se aventó una demanda contra Citibank y ahora va por más. El mero martes le puso otra demanda a dos bancos más: East West Bank y Cathay Bank, acusándolos de hacerse güeyes con su chamba de detectar movimientos raros.

Zidell dice que hizo montón de transferencias, unas 18 por casi 7 millones de dólares a una cuenta en East West Bank, y otras 13 por más de 9.7 millones a Cathay Bank, todas pa’ los supuestos estafadores. Apenas a finales de junio también estaba demandando a Citibank, porque cree que también pasaron por alto señales súper obvias en varias transacciones de millones.

La historia arranca cuando este Michael conoce por Facebook a una tal “Carolyn Parker”, que según ella se había vuelto millonaria con inversiones en NFTs. Después de poco, ella lo anima a meterle dinero a lo mismo y lo manda a una plataforma de trading. Michael, bien confiado, pone toda la lana: 43 transferencias que suman más de 20 millones de dólares en varias cuentas, porque le dijeron que tenían que mover el dinero en varios bancos por el volumen que llegaba.

Pero pues ya saben cómo va esto: en abril de 2023 la plataforma desapareció y con ella su lana. Un buen chasco. Michael dice que los bancos que usó Parker tampoco hicieron su chamba; los acusa de ayudar con su descuido, porque no cacharon las transas sospechosas ni pidieron informes cuando las cantidades eran bien grandes y redondas, que debería prender cualquier foco rojo.

Además, en esta última demanda, Zidell también acusa a East West Bank y Cathay Bank de hacer banda en el abuso de personas mayores, aunque no menciona su edad, la ley de California considera “mayores” a los que tienen más de 65 años. Él quiere que los bancos paguen por todo el daño, incluyendo gastos legales y más, con jurado incluido.

Al final, esto es una advertencia bien clara: en el mundo de las criptos todo puede ser un cuento, y la responsabilidad también cae en los bancos si no ponen atención. Así que si van a invertir, pilas y no se confíen ni de los bancos ni de nadie en internet.