¡Alerta Bitcoin! Así podemos salvarlo de los temibles ataques cuánticos antes que sea demasiado tarde
¿Te has puesto a pensar que Satoshi, el genio que inventó Bitcoin, podría estar vivo? La neta, si así fuera, no solo sería un crack de la inteligencia, sino también un maestro del autocontrol, porque no ha tocado ni un solo bitcoin en 16 años, y eso que tiene más de un millón, valorados en unos 110,000 millones de dólares —como para volverse la persona 16 más rica del mundo.
Imagínate que vive con calma, haciendo su luchita sin arranques, mientras ve cómo su creación va creciendo y su fortuna sigue ahí, firme, sin moverse. Para nosotros, que creemos que ya no está, esos bitcoins en su monedero son como un tesoro congelado que ayuda a aumentar el valor de lo que cada quien tiene. Pero ojo, que todo esto podría cambiar con la llegada de las computadoras cuánticas.
¿Por qué? Porque la computación cuántica es la amenaza más seria que Bitcoin ha enfrentado. No es cosa de película, son matemáticas duras: un algoritmo llamado Shor puede romper la forma en que Bitcoin protege las claves con su encriptación de curva elíptica. En cristiano, quien tenga una computadora cuántica podría hackear direcciones de Bitcoin que no se hayan actualizado para protegerse y agarrarse bitcoins, ¡incluyendo más del 30% del total del Bitcoin circulando ahora mismo!
En uno de los eventos más recientes, Bitcoin y la amenaza cuántica en Lugano Plan B 2025, los expertos comentaron la hora de actuar ya llegó. Se dice que el “Día Cuántico”, el momento en que esas computadoras sean suficientemente poderosas para romper la seguridad de Bitcoin, podría llegar en unos 10 años o quizá antes del 2030. Esto gracias a avances en qubits y algoritmos.
El detalle es que Bitcoin no es un sistema que se pueda actualizar de un jalón, porque está descentralizado. No hay un jefe que diga “vamos a cambiar esto así”, aquí todos tienen que ponerse de acuerdo, y sabemos que convencer a millones de personas es todo un reto. Ya vimos cómo se partió la comunidad con la Guerra del Tamaño de Bloques y luego con debates como el de OP_RETURN, que dejaron a los usuarios divididos.
Tomar decisiones para proteger a Bitcoin de esta amenaza va a ser un camino largo. Primero, hay que aceptar que hay un problema. Después, proponer soluciones y probarlas. Y para todo eso se necesita tiempo, mucha mente creativa y lana para pagarles a los cracks que se dediquen al trabajo. Convencer a quienes tienen la feria para apoyar la seguridad a veces es duro, porque invertir en prevenir no genera directamente más dinero, solo protege lo que ya tienes. Pero si no se hace, aparte de pérdidas, se podría perder la confianza en toda la red.
¿Cuáles son los riesgos concretos? Pues los hackers cuánticos podrían sacar las llaves privadas de las direcciones públicas que están registradas en la cadena de Bitcoin y robar las monedas. Bitcoin es como un efectivo digital: quien tenga las llaves privadas, es dueño del dinero. Hay varios tipos de direcciones vulnerables, especialmente las que comienzan con “1” y “3”, y las más nuevas como las “bc1p” también están en riesgo. Solo un 75% del total del Bitcoin estaría seguro por ahora.
Pero ojo, cuando haces una transacción, revelas tu llave pública para que Bitcoin pueda verificarla, y ahí es cuando un atacante con una computadora cuántica podría descifrar tu llave privada antes de que la transacción se confirme y robar tu dinero. Por eso urge mover todos los bitcoins a direcciones resistentes a estos ataques postcuánticos.
Aunque la minería no está en peligro inmediato, un avance cuántico podría hacer que los mineros cuánticos de verdad apabullen a los mineros normales, centralizando la minería y cambiando el juego. Pero eso todavía está lejano, por el alto costo de esas computadoras.
Un problema que impacta también al pasado de Bitcoin es el “ataque de exposición retroactiva”. Cuando una computadora cuántica rompa la encriptación, podría revelar todas las transacciones históricas desde 2009. Eso significa que se acabaría el pseudonimato que creíamos tener, y se podrían rastrear todos los movimientos de dinero, y saber quién es quién, afectando la privacidad de usuarios, empresas y gobiernos.
Además, proteger a Bitcoin implica actualizar todo el ecosistema: billeteras, exchanges, sidechains, y hasta la red Lightning. En esta última, por ejemplo, habría que cerrar y abrir canales para migrar a direcciones cuánticamente seguras, lo que podría cambiar quién tiene el control o ventaja en la red.
Entonces, ¿qué están haciendo para enfrentar esta amenaza? En septiembre de 2024, el desarrollador Hunter Beast presentó la propuesta BIP 360 o “QuBit – Pay to Quantum Resistant Hash”. La idea es integrar criptografía postcuántica junto con la ya usada en Bitcoin, creando nuevas direcciones que protejan contra ataques cuánticos. Aunque esta propuesta está en desarrollo y no hay acuerdo total en la comunidad, es un paso importante.
Por otro lado, Jameson Lopp sugirió en 2025 un plan para ir dejando atrás las firmas que son vulnerables al ataque cuántico, e incentivar poco a poco que la gente mueva sus bitcoins a direcciones más seguras, todo sin afectar el espíritu descentralizado de Bitcoin.
También se ha propuesto un soft fork para congelar los bitcoins en direcciones viejas y vulnerables, como las de Satoshi, para evitar que se roben en caso de una amenaza cuántica real. Pero esto genera debates sobre si es correcto inmovilizar esos fondos o no.
Mientras tanto, empresas como BTQ Technologies han demostrado que ya es posible tener un Bitcoin Core seguro contra ataques cuánticos, usando criptografía aprobada por estándares oficiales. Esto marca el camino para un futuro más seguro, aunque el proceso de actualización será complejo y delicado.
La cosa está corrida contra el tiempo, porque mientras se avanza en inteligencia artificial, la computación cuántica sigue creciendo. Cuando la burbuja de IA explote, muchos recursos podrían dirigirse a la computación cuántica, acelerando su llegada y aumentando los riesgos. Además, hay un botín enorme esperando: los bitcoins de Satoshi. Quien controle una computadora cuántica primero, puede meterse directo al top 15 de los más ricos del mundo.
Si Satoshi sigue vivo, ese podría ser justo el momento para que mueva o proteja su fortuna. Si no, la comunidad tendrá que decidir qué hacer con esos bitcoins “perdidos”: ¿quemarlos? ¿dejarlos en la red? ¿o qué? Estas preguntas no solo son técnicas, sino que también nos cuestan moral y filosofía.
Lo cierto es que hay que movernos ya. Nadie tiene derecho a ignorarlo ni a dejar que esto se enfríe. Desarrolladores, inversionistas y usuarios deben unirse para entender el problema, buscar soluciones y preparar a Bitcoin para este reto. Y sobre todo, cada quien que tenga bitcoin debe estar listo para migrar a nuevas direcciones cuando llegue el momento.
Esta es la mayor amenaza que ha tenido Bitcoin desde su inicio, y si queremos que siga vivo y fuerte, todos tenemos que ponerle ganas. ¡Vamos a mantener a Bitcoin invencible!

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