¿Bitcoin se desploma o se dispara? Descubre ya qué le espera al mercado en nuestro resumen explosivo

Los que fueron los primeros en subirse al tren del Bitcoin todavía andan medio escépticos sobre que las instituciones se la vayan a jugar en grande pronto, según Preston Pysh, el tipo que cofundó el fondo de riesgo Ego Death Capital.

Él dice que muchos de los que hicieron que Bitcoin llegara hasta donde está, ahora están viendo hacia dónde va todo esto y soltando un “no manches, no me late cómo se está moviendo”. Así lo contó en un podcast con Natalie Brunell.

Preston comenta que cuando las instituciones empiezan a meterle mano con cosas que son muy de ellos, como los derivados de Bitcoin, hay un buen de gente en la comunidad que se pone nerviosa. Se preguntan si esto va a arruinar la idea original de Bitcoin como ese refugio seguro para la lana.

Incluso, muchas personas en la comunidad están pensando: “¿Me están queriendo aventar otra estafa, como siempre pasó antes?”, porque conforme las instituciones se meten más, crece la desconfianza.

La bronca viene porque los que se rifaron para que Bitcoin pasara la barrera del billón de dólares, son en su mayoría individuos que guardan sus propios bitcoins con pinzas. Aunque hayan pasado caídas del 70 u 80 por ciento, ni se les ocurre vender. Preston los llama “psicópatas del Bitcoin”, algo así como unos fanáticos con todas las letras.

Hace poco hubo un cotorreo bien intenso en redes, donde Scott Melker, mejor conocido como The Wolf of All Streets, dijo que Bitcoin está increíble, pero que, en cierto modo, ya está siendo usado por quienes nunca se imaginó para qué fue creado.

Por otro lado, Ryan McMillin, que es director de inversiones en Merkle Tree Capital, dice que ver cómo los bitcoins viejitos se venden a nuevas instituciones es señal de que Bitcoin ya está entrando en el sistema financiero formal.

Preston también menciona que las instituciones van a usar Bitcoin de una manera bien distinta a la de los usuarios normales. Eso puede ser difícil de aceptar para muchos en la comunidad.

El espíritu de Bitcoin es ser medio desconfiado y cuestionarlo todo, y eso no va a cambiar. Más bien, parece que los escépticos seguirán jugando a la defensiva mientras más gente institucional se meta en el juego.

Por último, un reporte de Coinbase y EY-Parthenon dice que el 83% de los inversionistas institucionales quieren aumentar su inversión en criptoactivos para 2025, así que la cosa va para largo.

Ojo: No te creas cualquier cosa que leas y siempre investiga bien antes de meterle dinero, porque aquí nadie regala nada y siempre hay riesgos.